Gauss y Goya: los dos gigantes que se acercaron a las cosas
Tipo de documento
Autores
Lista de autores
Corrales, Capi
Resumen
El Museo Thyssen Bornemisza es el único museo en Madrid que nos permite seguir de forma continuada la evolución que ha seguido la pintura occidental desde el siglo XIV hasta bien entrado el XX. El propio edificio, uno de los más antiguos de Madrid, refleja, también, el paso del tiempo. El primer palacio fue construido en el siglo XVI, y Pico de la Mirándola lo arregló cien años después al gusto italiano de la época, llenando la fachada de todo tipo de decoraciones y adornos. Los españoles de entonces eran mucho más sobrios que los italianos (no tenemos más que pensar en los edificios de esa época construidos por arquitectos españoles, como la Puerta de Alcalá, el Observatorio Astronómico, la sala de Exposiciones del Botánico, el Prado o el Reina Sofía), y tanta decoración en la fachada les parecía una cursilada. En cuanto una familia española, los Villahermosa, lo compró en el siglo XVIII, se le quitaron los adornos a la fachada y se dejó como le vemos ahora. Durante el siglo XX fue pasando de entidad bancaria a entidad bancaria y casi lo destrozan. En 1990, una vez se había decidido convertirlo en Museo para albergar la colección de cuadros Thyssen, el arquitecto Moneo se encargó de arreglarlo y restaurarlo, llevando a cabo una obra muy importante y actual desde el punto de vista museístico y convirtiéndole en uno de los museos actuales de referencia obligada.
Fecha
2006