Organizado en cuatro partes —además de la “Introducción”, el “Epílogo” y la “Bibliografía”—, el libro incluye un total de 14 capítulos. A lo largo de sus páginas, la autora muestra con agudeza lo que encontró al entablar un diálogo con los profesores que abrieron sus aulas (de escuelas primarias públicas mexicanas) durante las clases de matemáticas. Observaciones de clases y entrevistas a profundidad con profesores realizadas durante dos periodos (1988-1991 y 1994-1997) permiten contar con lo datos en los que se apoya la argumentación.